Formalizar tu negocio es el primer paso y quizás el más importante en el camino hacia el crecimiento de tu empresa. Así podrás acceder a mercados con mayores oportunidades de negocio y obtener mayor rentabilidad para tu compañía.
Si eres un emprendedor que aún no formalizas tu negocio, te contamos las ventajas de ser formal y los riesgos de ser informal:
Ventajas de tener un negocio formal
- Te convertirás en un empresario responsable con tus clientes, trabajadores y país.
- Podrás participar en los diferentes programas de apoyo a las micro, pequeñas y medianas empresas.
- Te permitirá acceder a créditos en el sistema financiero formal
- Podrás participar en concursos públicos para ser proveedor de bienes o servicios del Estado.
- Podrás diseñar, fabricar y comercializar tus propios productos (marca registrada, patentes, diseños industriales, etc.)
- Te abrirá las puertas necesarias para poder exportar tus productos y aprovechar los acuerdos internacionales.
Desventajas de tener un negocio informal
- Como informal tienes una cantidad de clientes limitada. Muchos no podrán trabajar con tu empresa por no ser formal, por ejemplo, el Estado.
- Puedes ser sancionado por no cumplir con los requisitos mínimos de la ley.
- No cuentas con beneficios laborales de las empresas formales, como seguro y seguridad social.
- Otros negocios podrían usar tu nombre y marca, amparados por la ley.
- No puedes acceder a los programas del gobierno ni a sus procesos de contratación.
- No puedes ser proveedor del Estado ni de empresas grandes que exigen que sus proveedores sean formales.
- Ser informal te impedirá hacer crecer tu negocio.